Cuando se habla de navegadores prácticamente se cuenta sólo con los tres clásicos: Chrome, Firefox y Explorer (sustituído lentamente por Edge). Sin embargo hay un cuarto explorador con bastante solera y que a pesar de tener una pequeña cuota de utilización siempre ha tenido muy buena fama, y ese es Opera.
Desde los comienzos este navegador se ha caracterizado por incidir sobre todo en la seguridad y la privacidad, poniéndola por encima del rendimiento, y por eso no es de extrañar que hayan incluído un VPN gratuíto con la última versión para desarrolladores (en la versión estable todavía no aparece).
Pero comencemos por explicar los términos ¿Qué es una VPN? Es una red privada virtual, es decir, cuando te conectas a internet a través de una VPN lo que haces es estar conectado a una red local que está en otro sitio a través de un túnel cifrado, para que se entienda mejor, es como si echases un cable virtual desde tu ordenador hasta una red que puede estar en Rusia o Nueva Zelanda, por lo que tu IP pública (la que se ve en internet) con la que navegas no será la de tu conexión, si no la de la red a la que te has conectado.
¿Y qué ventajas e inconvenientes tiene una VPN? Principalmente hay dos claros beneficios. Por un lado tienes una conexión cifrada que no pueden ver los demás usuarios de tu red, lo que hace más segura la navegación sobre todo en sitios públicos, como la wifi de un bar o un centro comercial (aprovechamos para recordar que nunca uses datos confidenciales en un wifi público, los puede robar cualquiera sin mucho esfuerzo), y otro beneficio es el camuflar tu ip como si estuvieses en otro país, como por ejemplo para acceder a webs o servicios que tienen restricciones territoriales, como Netflix o algunos videojuegos. Básicamente los inconvenientes que tiene es que al navegar desde una red que está en el quinto pino la velocidad se resiente bastante, dependiendo también de la carga que lleve el servidor, y si navegas desde un VPN que no sea de confianza te arriesgas a que haya una persona quedándose con todos los datos que envías.
En el caso de Opera, compraron hace tiempo una compañía de VPN llamada SurfEasy Inc. y han ido integrándola poco a poco. Desde la versión estable del navegador aparece un enlace a la web de este proveedor para poder contratar distintos planes, pero si descargas la versión developer lo único que hay que hacer es entrar en las opciones de privacidad y seguridad la conexión VPN.
Con esta opción Opera implementa una opción que no tienen de serie los demás navegadores (aún menos gratis) y nos sirve para recordar que detrás de los tres clásicos hay opciones bastante interesantes y que no debemos desechar en absoluto a la hora de navegar por internet.